La trayectoria de SHALAPI comenzó hace mucho tiempo. Empezó con algo pequeño, como casi todo, pero con una idea muy precisa: crear calzado de calidad con un diseño atemporal y a un precio razonable. Un producto que resistiera tanto el paso del tiempo como las tendencias. ¿Cómo se combinan artesanía de primera calidad con un precio asequible? En SHALAPI nos enorgullecemos de nuestra dedicación a la artesanía y, si bien todo el trabajo de diseño se realiza en nuestra sede de Nápoles, los zapatos son confeccionados por artesanos experimentados en Italia, con quienes mantenemos una larga relación. Por ello, optamos por no añadir grandes márgenes de beneficio, sino que nos esforzamos al máximo para mantener todos nuestros zapatos a un precio que consideramos representativo de la artesanía invertida en su producción. En resumen, esto equivale a lo que nos gusta llamar calzado premium sin el precio de lujo. El diseño italiano, la atención al detalle y los materiales de la más alta calidad, procedentes de las mejores curtidurías del mundo, son la base de nuestro negocio. Muchísimas gracias por ello. Aunque aún nos enorgullecemos de nuestra herencia italiana, nuestros zapatos se usan hoy en día en todo el mundo y no solo en Italia se conoce la marca. El despegue desde Italia no es lo único que ha cambiado. Nuestro primer zapato fue un Oxford, y aunque aún conservamos muchas opciones formales en nuestro arsenal, la gama ha crecido desde entonces hasta abarcar desde zapatillas y botas hasta accesorios. Todos comparten el denominador común de un diseño atemporal, y todos son fruto de nuestra decisión consciente de producir zapatos que duren muchos años. Juntos conforman SHALAPI: calzado premium sin un precio elevado.